miércoles, 7 de diciembre de 2011

Danoma

Llegamos al final de Danoma, a unas escaleras ocultas por unas lianas que colgaban de los arboles que había en los lados de estas. Flora subió por ellas y se perdió entre las ramas. Dudé un par de segundos, pero decidí que si había llegado hasta ahí debía continuar. Subí el primer escalón, el segundo...debía ir apartando las lianas de los árboles para poder ver donde tenía que pisar. Al apartar la ultima liana, el sol me dio de lleno en la cara. El sonido de una cascada rompió el silencio del momento. Parpadeé unas cuantas veces, pues aun tenía manchas en mi visión producidas por el sol. Era como si el lugar se fuera dibujando a cada abrir y cerrar de ojos, hasta dar la última pincelada y quedar completamente dibujado. Un hermosos lugar verde, la hierba suave acompañada de flores que parecían de seda y papel charol.

No hay comentarios:

Publicar un comentario